DE SOLANS A AGAPITO. EL CAMINO A LA PERDICIÓN

LOS PRIMEROS SEIS MESES

El 26 de mayo de 2006 Alfonso Solans cerraba la venta del Real Zaragoza a Agapito Iglesias y Emilio Garcés aunque días después este último se desvinculó de la entidad.

El 5 de julio se celebró una Junta General Extraordinaria de Accionistas para constituir el nuevo Consejo de Administración en el que fueron nombrados Eduardo Bandrés (Consejero de Economía del Gobierno de Aragón) como presidente ejecutivo y consejero delegado junto a Agapito Iglesias, Manuel Teruel como vicepresidente y Fernando Zamora como secretario del consejo. El resto de nombramientos fueron José Antonio Gómez de la Fuente, José Luis Melero, Juan Ramón Fabre, José María Serrano y Agustín Ubieto.

El 12 de diciembre tuvo lugar la Junta General de Accionistas en la que se aprobó el balance de la temporada 2005-2006 con una deuda de 70.646.440 €.

En el pleno del Ayuntamiento de Zaragoza del 22 de diciembre de 2006 se aprobó la recalificación del solar que ocupaba el pabellón multiusos que pasó de equipamiento deportivo a residencial a cambio de entregar a la ciudad un local en el futuro edificio de entre 250 y 300 metros y la cesión del campo de Entrerrios. Con esta operación se esperaba ingresar una cantidad situada entre 20 y 30 millones de euros, algo que no se consiguió ya que esta parcela fue utilizada como garantía para obtener un préstamo de Ibercaja y ante el incumplimiento de los pagos, la entidad financiera ejecutó la garantía. Este solar fue adquirido por la inmobiliaria Plaza 14.

El 30 de diciembre de 2006 en una entrevista al Diario AS, Agapito Iglesias resumió las líneas de su proyecto indicando que quería conseguir un equilibrio en el balance económico para que el club pudiera ver el futuro con ilusión y tranquilidad. Apostó por la estabilidad puntualizando que no se podía cambiar de entrenador cada temporada y que se había firmado un contrato a Víctor Fernández por 4 años pero que su intención era que continuase mucho mas. Indicó que la situación económica era salvable siempre y cuando hubiera resultados deportivos y que le gustaba el modelo del Villarreal, Sevilla y Deportivo de la Coruña. El objetivo era mirar hacia arriba, mejorar cada año y no se marcharía del Real Zaragoza sin ganar una Liga.

EL PRIMER PROYECTO

En el plano deportivo la principal salida fue la de Cani al Villarreal que no estuvo exenta de polémica ya que Apapito Iglesias acusó al jugador de marcharse sin haber hablado con su grupo mientras que el jugador respondió a estas acusaciones indicando que nadie del nuevo grupo que había adquirido el club se había dirigido a él.

Para reforzar la plantilla llegaron Juanfran, Sergio Fernández, Gerard Piqué, Carlos Diogo, Pablo Aimar y Andrés D´Alessandro.

El inicio de temporada fue bueno y el equipo peleaba por las primeras posiciones de la clasificación pero un mal final de temporada dejó al club en sexta posición, algo que garantizó la participación en la Copa de la UEFA.

75 ANIVERSARIO

En su segunda temporada se celebraba el 75 aniversario del club y se retornaba a competiciones europeas. El equipo perdió a Gabi Milito, Ewerthon, Piqué, Movilla y Lafita pero incorporó a Ayala, Luccin, Gabi, Oliveira y Matuzalem.

Todo se desmoronó demasiado pronto, se caía eliminado en la Copa de la UEFA en la primera eliminatoria ante el Aris de Salónica y en La Liga el equipo no funcionaba. Esto provocó el cese de Víctor Fernández, que fue el primer inquilino de los 4 entrenadores de esta temporada, le sucedieron Ander Garitano, Javier Irureta y Manolo Villanova.

La plantilla más cara de la historia del Real Zaragoza descendía a Segunda División tras perder en la última jornada por 3-2 ante el Mallorca. La alineación de aquel partido estuvo formada por César, Zapater, Ayala, Sergio Fernández, Juanfran, Celades, Gabi, Sergio García, Aimar, Diego Milito y Oliveira.

Este fracaso provocó que Miguel Pardeza presentará su dimisión irrevocable como Director Deportivo.

PRIMER AÑO EN SEGUNDA

La temporada 2008/2009 comenzaba con un único objetivo, el ascenso, y para ello se incorporó al técnico del momento, Marcelino García Toral. Se produjo la salida de los principales jugadores como Aimar, Matuzalem, Diego Milito, Sergio García, César, Sergio Fernández y Oliveira, que se marchó en el mercado de invierno.

El mejor fichaje fue Ewerthon que regresó tras su cesión en el Español y marcó 28 goles, además llegaron Arizmendi, Jorge López, Caffa, Doblas, Pulido, Pignol, Braulio, Antonio Hidalgo, Songo´o y Fabio Coentrao.

Tras un inicio irregular, el equipo realizó una segunda vuelta espectacular y se consiguió el ascenso.

Se retornaba a Primera con la intención de asentar al equipo en la categoría pero no fue una temporada fácil.

RETORNO A PRIMERA, A LA PRIMERA

En verano se renovó la plantilla con las salidas de Zapater, Pignol, Caffa, Doblas, Chus Herrero, Generelo y Cuartero y las llegadas de Carrizo, Abel Aguilar, Lafita, Pablo Amo, Pennant, Babic, Uche y Obradovic.

En agosto se anunció la incorporación de Gerhard Poschner como Director General aunque el alemán no contaba con experiencia en un cargo similar. Llegó como amigo intimo de Agapito Iglesias, relación que posiblemente diez meses después no fuera la misma ya que anunció su salida de forma irrevocable por voluntad propia.

Marcelino fue destituido en la jornada 14 tras sumar 12 puntos y se hizo cargo del equipo el entrenador del filial José Aurelio Gay.

LA PRIMERA REVOLUCIÓN INVERNAL Y LA DIMISIÓN DE EDUARDO BANDRÉS

La situación clasificatoria no era buena y en el mercado de invierno se revolucionó la plantilla con las llegadas de Suazo, Contini, Eliseu, Roberto, Edmilson, Colunga y Jarosik y las salidas de López Vallejo, Ayala, Braulio, Ewerthon y Songo´o.

Eduardo Bandrés presentó su dimisión el 30 de diciembre de 2009, anunció que dejaba de ser presidente del club y que cesaba el Consejo de Administración de pleno. El club no tuvo Consejo de Administración hasta que en la Junta General Extraordinaria celebrada el 29 de marzo de 2010 se anunció que estaría formado por Javier Porquera, Francisco Checa y Agapito Iglesias, además se cifró la deuda del club en una cantidad cercana a los 100 millones de euros.

INESTABILIDAD

La temporada 2010/2011 comenzó con José Aurelio Gay en el banquillo mientras que la plantilla cada temporada perdía calidad. En el mercado de verano salieron Carrizo, Pulido, Abel Aguilar, Colunga, Eliseu, Arizmendi, Roberto, Pennant, Suazo, Pablo Amo y Pavón y llegaron Leo Franco, Doblas, Boutahar, Bertolo, Sinama-Pongolle, Lanzaro, Da Silva, Marco Pérez y Pinter.

Tras 11 jornadas y solo 7 puntos, José Aurelio Gay fue destituido y llegó el mexicano Javier Aguirre.

En el mercado de invierno se incorporó a N´Daw y se consiguió una salvación milagrosa en la última jornada ante el Levante.

CONCURSO DE ACREEDORES

El club arrastraba graves problemas económicos y en junio de 2011 entró en concurso de acreedores, proceso que duró menos de 11 meses y que supuso situar la deuda en torno a 92 millones de euros (145 millones antes del concurso).

Luchar por la permanencia se había convertido en el objetivo del Real Zaragoza cada temporada y el cambio de entrenador antes de finalizar la primera vuelta era una rutina. Esta temporada no fue menos, Javier Aguirre dejaba el equipo tras 17 jornadas y 10 puntos conseguidos, le sustituía Manolo Jiménez.

En verano se revolucionó la plantilla, con la ayuda de Jorge Mendes. Se incorporó a Abraham Minero, Edu Oriol, Mateos, Juan Carlos, Rubén Micael, Helder Postiga, Luis García, Zuculini, Meira, Barrera, Juarez y el regreso de Roberto Jiménez. Las salidas fueron Contini, Gabi, Ander Herrera, Nico Bertolo, Sinama-Pongolle, Doblas, Jorge López, Boutahar, Jarosik, Goñi, Laguardia, Braulio y Uche.

En el mercado invernal se realizo otra mini revolución con las llegadas de Apoño, Aranda, Antonio Tomás, Pablo Álvarez y Dujmovic y las salidas de Ponzio, Juarez y Meira.

NUEVO CONSEJO DE ADMINISTRACIÓN

Además de los cambios en la plantilla, el 30 de diciembre de 2011 Agapito Iglesias presentó a Salvador Arenere (Presidente de ADEA) como nuevo Consejero Delegado del Real Zaragoza que formaría, junto con Carlos Iribarren, José Guillén y Fernando Rodrigo, el nuevo Consejo de Administración que se encargaría de la gestión del club.

Salvador Arenere indicó que llegaban para salvar al Real Zaragoza y dejó claro que el nuevo Consejo tenía capacidad ejecutiva, que trabajaría de manera independiente y que en caso de no ser así abandonaría inmediatamente.

El 9 de enero de 2012 el nuevo Consejo dejó la gestión del Real Zaragoza. El motivo fue que la cesión total de la gestión de la entidad por parte de Agapito Iglesias no se había producido ni era fácil que se produjera.

Antes de finalizar la temporada Agapito Iglesias despidió a Pedro Herrera, Luis Costa y Manolo Nieves.

Esta temporada se volvió a repetir el milagro de la anterior y el equipo conseguía la salvación contra el Getafe.

NUEVO PRESIDENTE EJECUTIVO Y EL DESCENSO

La séptima temporada de Agapito Iglesias, la 2012/2013, fue como las anteriores, el entrenador salvador comenzó la temporada pero en este caso la terminó.

Agapito Iglesias anunció el 10 de junio de 2012 que Fernando Molinos era el nuevo presidente ejecutivo del Real Zaragoza aunque un año después abandonó el puesto. Pocos días después de su llegada se hacía oficial la salida de Antonio Prieto que llegó al club en 2008 y en su primera temporada desempeño las funciones de Secretario Técnico y las tres siguientes fue Director Deportivo.

De nuevo se cambió media plantilla en el mercado de fichajes veraniego con la llegada de Sapunaru, Álvaro González, Loovens, Movilla, José Mari, Montañés, Víctor Rodríguez, Romaric, Babobic, Javi Álamo y Wilchez y las salidas de Da Sílva, Lafita, Rubén Micael, Luis García, Juan Carlos, Barrera, Pablo Álvarez, Mateos, Dujmovic, Braulio y Antonio Tomás. En el mercado de invierno se reforzó la plantilla con las incorporaciones de Rochina, Rodri, José Manuel Fernández, Bienvenu y Carmona, solo se produjo la salida de Wilchez.

Manolo Jiménez mantuvo al equipo en la zona tranquila de la clasificación durante la primera vuelta, pero una racha de 15 jornadas sin ganar (de la jornada 18 a la 32) hizo caer al equipo en puestos de descenso, posición que no logró abandonar al sumar 1 de los últimos 12 puntos en juego.

RETORNO A SEGUNDA DIVISIÓN

Con la salida de Fernando Molinos, Agapito Iglesias dio un paso atrás y apostó por Jesús García Pitarch como Director Deportivo. Llegó junto a Moisés García León, José Ignacio Soler y Jordi Bruixola aunque todos ellos abandonaron el club a final de temporada pese a que tenían dos años mas de contrato.

Pitarch llegó al Real Zaragoza recomendado por la Liga de Fútbol Profesional con el fin de realizar un recorte económico en el club y entre sus decisiones mas polémicas se encontraron los despidos de José María Movilla, José María Martín y Javier Paredes.

Para esta temporada se pretendía repetir lo conseguido en la 2008/2009, ascender a la primera, pero lejos de ello, el equipo terminó peleando por la salvación.

Paco Herrera se hizo cargo de un equipo que sufrió un profundo cambio. Salieron Roberto, Sapunaru, Loovens, Apoño, Helder Postiga, Rodri, Rochina, Romaric, Babovic, Bienvenu, Carmona, Pinter, Zuculini y Edu Oriol y se incorporó a Roger, Barkero, Cidoncha, Henríquez, Acevedo, Paglialunga, Cortés y Luis García que volvía tras su cesión. En el mercado de invierno llegó César Arzo y salieron los citados anteriormente, Movilla, José Mari y Paredes.

Se comenzó la temporada de forma irregular y aunque el equipo alcanzó los puestos para pelear por el ascenso, una racha en la que tan solo se sumaron 3 puntos de 21 posibles provocó la destitución de Paco Herrera que fue sustituido por Víctor Muñoz. La trayectoria continuó irregular y se terminó la temporada mirando mas hacía abajo que hacía los puestos de ascenso.

PROCESO DE VENTA

La recta final de Agapito Iglesias en el Real Zaragoza estuvo envuelta por sus problemas con la justicia y por un rocambolesco proceso de venta en el que apareció un grupo de empresarios aragoneses, Kadir Sheikh, un fondo árabe y un grupo mexicano aunque finalmente cedió sus acciones a la Fundación 2032.

La gestión de Agapito Iglesias en el Real Zaragoza dejó un equipo minimizado, sin patrimonio y con una deuda descomunal.